Cuando nos vamos a embarcar en un proyecto ilusionante, por mucho que nos embarguen las emociones, lo primero que debemos determinar es su viabilidad económica. Sin haberla determinado previamente, es muy probable que al final lo único que obtengamos sean pérdidas.
En este post vamos a ver una serie de aspectos que nos ayudarán a determinar la viabilidad económica de un proyecto.
Los costes son todos aquellos gastos que vamos a tener para poner en marcha el proyecto. Pueden producirse en dos momentos:
Por lo que debemos tenerlos en cuenta en ambos.
Por otro lado, también debemos entender los costes en su sentido más amplio. Es decir, no debemos centrarnos solo en el aspecto monetario, sino que hay otros dos realmente importantes:
En resumen: un proyecto que vaya a implicar más costes que beneficios, es decir, que tenga poco retorno de la inversión, en general no es un proyecto que tenga una buena viabilidad económica.
El target o público objetivo es aquel perfil de personas al que nos dirigimos. Algunos de los parámetros que utilizamos al definirlo son:
Y otro muy determinante respecto a la viabilidad económica: el nivel de ingresos. En general, si nos dirigimos a un target con un nivel bajo de ingresos, necesitaremos una mayor cantidad de clientes que nos compren que si nos dirigimos a un target con un nivel de ingresos elevado.
Por lo tanto, el target al que nos dirigimos también influye a la hora de determinar la viabilidad económica de un proyecto.
Entendemos por tendencias del mercado aquellas subidas y bajadas en la compra y en la venta de distintos productos o servicios. En este sentido, las modas influyen mucho: cuando un producto está de moda, se compra mucho más que cuando no lo está.
La viabilidad económica de un proyecto va a estar determinada por el momento en el que lo lancemos al mercado. Si nuestro producto se encuadra en un sector con una tendencia creciente de mercado, tendrá una viabilidad económica mayor que si se encuadra en un sector con una tendencia decreciente.
Por supuesto, en un artículo sobre viabilidad económica no podía falta el factor competencia. Antes de lanzar un proyecto al mercado debemos analizar la cantidad y el poder de cada uno de nuestros posibles competidores.
En este sentido, influye lo que se conoce como saturación del mercado. Si hay muchas empresas que ofrecen el mismo producto o servicio, entenderemos que este sector está saturado. En muchas ocasiones, aunque la tendencia del mercado en ese sector sea creciente, no compensa entrar en él si hay una saturación elevada.
De modo que cuando quieras lanzar un proyecto al mercado, recuerda determinar su viabilidad económica. Si estudias y analizar los cuatro factores que hemos comentado en estas líneas y tomas tus decisiones en función de ellos, tus probabilidades de obtener beneficios se multiplicarán.