17 de diciembre de 2018

¿Qué es la escucha activa y cómo mejorarla?

que es la escucha activa

Saber qué es la escucha activa y cómo mejorarla es fundamental para aquellos empresarios que deseen mejorar la productividad de su equipo humano sin tener que tocar su sueldo. ¿Te parece interesante? Te aseguramos que lo es, así que ¡adelante! Empieza a leer…

¿Qué es la escucha activa?

Si sueles leer nuestro blog, seguro que sabes qué es la escucha activa; de todas formas no viene mal refrescar el concepto, ¿verdad?

Podemos definir a la escucha activa como una habilidad comunicativa innata o adquirida que permite al interlocutor comprender perfectamente el mensaje que le está lanzando otra persona a través del lenguaje verbal y no verbal.

Dos puntos especialmente importantes sobre lo que es la escucha activa realmente:

  1. Es una habilidad innata. Esto quiere decir que podemos nacer “sabiendo” escuchar activamente, pero que también podemos desarrollar esta aptitud, potenciarla y mejorarla.
  2. Es una habilidad aprendida. Todo el mundo puede aprender a escuchar de forma activa. Existen técnicas, cursos y talleres que enseñan esta habilidad que, como luego veremos, es fundamental para ciertos CEO y directivos que desean practicar una comunicación persuasiva.

¿Para qué sirve practicar la escucha activa?

Sin lugar a dudas, practicar la escucha activa en nuestro plano personal, familiar y de amistad nos ayudará a mejorar la comunicación con nuestros seres queridos, a resolver los conflictos, a prevenir discusiones por malas interpretaciones, etc. Pero ¿para qué sirve practicar esta habilidad comunicativa en el plano profesional y empresarial?

Podríamos decir que la escucha activa es clave tanto en los procesos de comunicación interna como en los procesos de comunicación externa que mantenemos con proveedores y clientes.

La escucha activa es clave en todos los procesos de comunicación interna ya que:

  • Evita discusiones, malentendidos y confusiones entre los miembros del equipo de trabajo.
  • Ayuda a dirimir disputas profesionales que enturbian el clima laboral de la organización.
  • Aclara las responsabilidades asignadas en cada hito de un proyecto.
  • Ayuda a prever futuros problemas relacionados con los factores humanos.
  • Etc.

La escucha activa es clave en todos los procesos de comunicación externa ya que:

  • Evita discusiones, malentendidos y confusiones con nuestros proveedores y clientes.
  • Ayuda a aclarar las responsabilidades adquiridas por las dos partes (empresa y proveedores o empresa y clientes).
  • Mejora la calidad de los servicios de atención al cliente.
  • Ayuda a convertir a los clientes esporádicos en clientes cautivos.
  • Etc.

Claves para mejorar la escucha activa

Como comentábamos unas líneas atrás, la escucha activa es una habilidad comunicativa que se puede mejorar o aprender desde cero. ¿Cómo se hace? De muchas y muy variadas formas como, por ejemplo, las siguientes:

  1. Crea un ambiente relajado. El ambiente en el que se desarrolle la conversación debe ser propicio para que el mensaje fluya libremente y sin barreras. Evita los ambientes ruidosos donde no paren de sonar los teléfonos o de circular gente.
  2. Conoce a tu interlocutor. Cuanto más conozcas a la persona que tienes delante, mejor sabrás interpretar su lenguaje no verbal, su postura corporal, la dirección de su mirada, el significado real de sus expresiones verbales y no verbales, etc.
  3. No juzgues ni prejuzgues. Juzgar lo que te está contando alguien antes de que termine su discurso es una gran barrera comunicativa que te impedirá comprender realmente el sentido del discurso.
  4. Aprende a no interrumpir. Esta es una de las claves más importantes de la escucha activa: no interrumpir a tu interlocutor tomando la palabra cuando no te corresponde.
  5. Entrena tu capacidad de observación. Recuerda que para practicar la escucha activa es fundamental el lenguaje no verbal que te está trasmitiendo tu interlocutor a través de su ropa, su peinado, su mirada, su silencio…

Entrena tu lenguaje no verbal. La escucha activa es una habilidad comunicativa en la que tú también estás trasmitiendo muchas cosas sin decir ni una sola palabra. ¿Qué quiere decir eso? Que debes trasmitir a tu interlocutor que le estás escuchando activa y proactivamente no solo no interrumpiendo su discurso de forma verbal, sino mirándolo a los ojos, no jugando con el bolígrafo, no cruzando los brazos sobre tu pecho…

Edenred España

Publicaciones relacionadas