17 de mayo de 2019

Valores en el trabajo y su importancia

¿Qué son los valores en el trabajo? El término valor tiene muchas acepciones, pero en este post nos vamos a centrar en la que hace referencia a las cualidades de una persona o de una entidad por las cuales otras personas se decantan hacia ellas.

Veamos con más detalle esta definición para comprender realmente lo que implica.

Valores en el trabajo: ¿qué son realmente?

El objetivo de toda empresa es generar beneficios. Para ello son vitales los clientes, ya que son ellos quienes compran los productos y los que contratan los servicios de la empresa. Pero ¿cómo capta clientes la empresa? A partir de sus valores hacia el mercado y de sus valores en el trabajo.

La competencia en el mercado es cada vez mayor. En otras palabras, cada vez surgen más empresas que ofrecen soluciones similares a las que ofrece la nuestra, o incluso iguales. Por lo tanto, la diferenciación es cada vez más complicada de conseguir. ¿Qué podemos hacer en este entorno tan competitivo?

La clave se encuentra en los valores. Un cliente decidirá comprarnos a nosotros en lugar de comprar a nuestra competencia en función de cuánto coincidan nuestros valores con los suyos. Hablamos de cuestiones como la transparencia, la confianza, el trato amigable y un largo etcétera. Por poner un ejemplo sencillo: si uno de los valores a los que nuestros clientes potenciales da más importancia es la ecología, decidirán entre comprarnos a nosotros o a nuestra competencia en función de cuánto de ecológicos seamos y mostremos ser. Detalles como disponer en el local físico de una papelera específica para plásticos o incluir un pie en nuestros correos electrónicos con el mensaje de «no imprima esto a no ser que sea estrictamente necesario» son ejemplos de esas muestras que el cliente necesita.

Ahora bien, de nada sirve que la empresa disponga de unos valores y los muestre si sus empleados no comulgan con ellos y no los ponen en práctica. Es entonces cuando surge el concepto real de valores en el trabajo. Dado que nuestros empleados entrarán en contacto con nuestros clientes un número mayor o menor de veces, es importante que muestren los valores de la empresa exactamente igual que los muestra aquel mensaje al pie de cada correo electrónico.

Una vez comprendido este aspecto tan crucial, veamos cómo fomentar los valores en el trabajo para conseguir el efecto deseado en nuestra clientela.

Valores en el trabajo: ¿cómo fomentarlos?

En primer lugar, en todo proceso de selección de personal debemos asegurarnos de que los candidatos que vayamos a elegir para que formen parte de nuestra empresa comulgan con sus valores. En caso contrario, no serán capaces de representarlos de forma eficaz y creíble como valores en el trabajo. Para ello, basta con preguntarles qué opinan acerca de ciertos aspectos y detectar cuándo están siendo sinceros en sus respuestas y cuándo no. El perfil profesional del entrevistador en este sentido influye de manera importante.

Una vez que ya hemos elegido a los candidatos que hemos considerado apropiados, debemos formarlos para que sepan cómo comunicar y adherirse a los valores que la empresa representa. Hay muchas maneras de poner en práctica un mismo valor y cada empresa tendrá la suya propia.

Además, para lograr lo anterior, la empresa debe contemplar valores en el trabajo. Es decir, además de los que se proyectan hacia el cliente, debe disponer de unos valores internos como el compañerismo o la colaboración. Si un trabajador no se encuentra a gusto por considerar que sus valores no coinciden con los de su entorno laboral, difícilmente podrá hacer un buen trabajo.

Es por ello que la empresa debe proporcionar soluciones y disponer de planes de incentivos que se adhieran a los valores importantes para el trabajador y no solo para los clientes. Por ejemplo, si la empresa tiene como valor el compromiso con la paternidad y maternidad de sus trabajadores, puede optar por proporcionarles un ticket guardería que les ayude a conciliar la vida laboral con la familiar.

En definitiva, los valores en el trabajo deben proyectarse tanto hacia dentro como hacia fuera por parte de los empleados. Solo así la empresa alcanzará la productividad.

Edenred España