Un verdadero líder debe guiar a sus empleados al éxito sacando siempre lo mejor de ellos. Llegar a serlo no es tarea fácil: debe medir con cuidado lo que hace y dice, ya que de eso dependerá el rendimiento de su equipo. Por eso hay frases que un líder no debe decir nunca.
Ser un gran líder no es sólo cuestión de aptitud, sino de actitud. Un gran líder no es sólo aquel que tiene un conocimiento y una experiencia sobresaliente en su profesión. También es aquel que cuya coherencia, motivación y dedicación saca lo mejor de los miembros de su equipo.
Los auténticos líderes tienen la habilidad de saber qué decir y qué no decir en cada momento. Esta habilidad es clave para maximizar la productividad, el compromiso, la confianza y la motivación de su equipo.
Máxime en periodos como esta pandemia, con muchos empleados trabajando a distancia y aislados por estar contagiados o ser contacto estrecho.
¿Quieres ser un auténtico líder y guiar a tu equipo al éxito? No pronuncies jamás estas 9 frases que un líder no debe decir nunca y conocerás de primera mano algunas diferencias entre un líder y un jefe.
A nadie le gusta que su jefe sea un tirano o un dictador en el trabajo. Por supuesto, tus empleados ya saben quién está al mando, pero recordárselo de esta manera tan explícita te sitúa en un lugar poco privilegiado si lo que pretendes es mantener el aprecio de tu equipo.
Un jefe tirano es un jefe del que los empleados tratarán de huir siempre. No resuelvas una discusión con esta frase ya que evidencia una falta de comunicación en ambas vías. Si tienes en cuenta sus opiniones, ellos tendrán en cuenta las tuyas.
La empatía es clave en un auténtico líder, y más aún en tiempos de pandemia como los actuales, en los que el teletrabajo en las empresas que lo llevan a cabo supone no estar en el ambiente de trabajo, sin más aislados. Sin ella, la confianza con tus empleados nunca será completa.
Si un miembro de tu equipo tiene un problema relacionado con su trabajo, tienes la responsabilidad de buscar una solución. No te cobijes en un “ese no es mi problema” y céntrate en un “veremos cómo podemos solucionarlo”.
Esto sólo lo dirán los líderes que no son capaces de mirar hacia delante, adaptarse a los nuevos tiempos e innovar. ¿Acaso eres uno de ellos? Si no es así, seguro que eres capaz de escuchar y valorar las ideas de tu equipo. Cambia esta frase por un “aquí haremos las cosas de la mejor forma posible”.
Esta frase demuestra una limitación que un auténtico líder no debe tener. No hay límites si creemos que podemos. Así que el “no puedo…” debe desaparecer de nuestro vocabulario para dar paso a un “¿cómo puedo…?”. Esto inspira una actitud creativa e innovadora, características clave de los grandes líderes.
El trabajo es tan personal como cualquier otro aspecto de nuestra vida. De nuevo, la empatía con tu equipo es clave, pues las relaciones personales en el trabajo son inevitables, incluso necesarias. Todo es personal, no lo olvides.
Tus empleados no son autómatas y, ciertamente, necesitas que piensen. Es la única forma de alcanzar los objetivos, mejorar los procesos y avanzar como empresa. Esta sentencia es lapidaria para un empleado comprometido con su trabajo ya que da a entender que su implicación no es valiosa. Es otra de las frases que un líder no debe decir nunca.
Esta frase denota una falta de opinión o de compromiso con los objetivos marcados. En definitiva, indiferencia. Por supuesto, un líder indiferente no será nunca un gran líder. A uno de verdad, ejemplo de liderazgo democrático, le importa y le interesa la opinión de sus empleados y presta atención a los detalles, por muy pequeños que éstos sean.
Con esta frase se da a entender que el jefe está haciendo un favor a su empleado permitiéndole trabajar con él. ¿Crees que tu empleado no es válido para trabajar en tu equipo? Motívale y dale la vuelta a la tortilla.
De vez en cuando no viene mal y una palmada en la espalda para decirle que tienes la suerte de poder contar con él en el día a día. Sin duda, motivar siempre aumentará la confianza en ti dentro del equipo.
Esto son solo 9 de las frases que un líder no debe decir nunca. Seguro que se te ocurre alguna más. Y recuerda, hablar en positivo siempre es más efectivo para conseguir que tus empleados se comprometan con los objetivos. Si lo haces, ten por seguro que los resultados llegarán.
